Por : James Rodriguez - LeBron James, oficialmente tienes compañía.
James quizá sea el mejor basquetbolista del planeta, pero hasta el momento en esta temporada, alguien ha sido mejor en casi todos los parámetros.
Y su nombre es Kevin Durant.
James encabezó la NBA en PER (rating de eficiencia de jugador) la mayor parte de la temporada por un amplio margen, y generalmente no ha sido retado en esa métrica durante años. Pero Durant, en esta temporada, ha finalmente recortado la distancia, y eclipsado el promedio de James luego de un ridículo fin de semana de partidos. Durant incendió a los Minnesota Timberwolves con 48 puntos y siete asistencias, en una victoria apretada el sábado, y luego metió 21 puntos y 8 asistencias en apenas 27 minutos de actividad durante una victoria por paliza al día siguiente contra los visitantes Boston Celtics. Lo sentimos por el Utah Jazz, que enfrentará la ira de Durant el martes.
Observen el tablero de líderes de PER y verán que Durant es ahora el rey con un 29.1 de rating, que actualmente es mejor que el 29.0 de James. Recuerden, el PER es una métrica por minuto que se ajusta de acuerdo a la actividad en la cancha, así que el hecho de que Durant haya disputado un partido extra no afecta la clasificación. WARP, la métrica todo-en-uno de mi colega de Per Diem Kevin Pelton, también pone a Durant en el liderato con un rating de 9.0. Victorias compartidas, que se puede encontrar en Basketball-Reference.com, también señala a Durant como el mejor de la campaña.
Las estadísticas tradicionales también apoyan de forma entusiasta la temporada de Durant. Hasta el momento, Durant ha sido el líder anotador con 29.0 puntos por partido (solamente Kevin Love se le acerca, con 26.4), pero él acierta 49.6 por ciento en tiros de campo, 42 por ciento en triples y 88.4 por ciento en tiros libres. No solamente eso, Durant sigue expandiendo su juego en otras áreas, consiguiendo rebotes (12 por ciento de todos los rebotes disponibles) y repartiendo asistencias (generando la asistencia en un estimado de 23.4 por ciento de los encestes de sus compañeros cuando está en la cancha) con los promedios más altos de su carrera.
Pónganlo todo junto y ustedes tienen al jugador de mayor calidad en la NBA hasta el momento, incluso mejor que James, cuya eficiencia de disparo todavía está en un promedio récord de todos los tiempos, pero el resto de sus estadísticas van a la baja. Observando el panorama general, el Thunder sigue siendo el mejor en una Conferencia Oeste saturada, con un récord de 27-7 y no han sufrido ningún desplome sin Russell Westbrook, que se ha perdido los últimos seis partidos de Oklahoma City luego de someterse a una cirugía en su rodilla derecha el 27 de diciembre. Desde que surgieron las malas noticias de Westbrook, el Thunder se ha ido con récord de 4-2, sufriendo derrotas apretadas ante los Portland Trail Blazers y los Brooklyn Nets.
Y así está la cosa con la lesión de Westbrook: los números dicen que Durant no ha extrañado para nada a su copiloto. De hecho, Durant ha jugado a niveles de superhéroe sin el estelar base a su lado. En los últimos seis partidos, Durant promedia 32.8 puntos, 9.5 rebotes y 5.5 asistencias, mientras acierta 51.9 por ciento en tiros de campo y 40.5 por ciento de triples. Esto sigue una tendencia fascinante que ha sido cierta durante toda la temporada: Durant ha jugado mucho mejor cuando Westbrook está en la banca.
En esas situaciones, Durant ha sido mucho más prolífico y más letal con sus disparos, consiguiendo un 65.1 de porcentaje auténtico de tiros (que incorpora los tiros libres y el valor agregado de los triples), y un 33.7 por ciento de promedio de uso, que encabezaría la liga. Sus estadísticas de rebotes suben a 9.4 por cada 36 minutos, algo que tiene sentido ya que Westbrook es un reboteador de élite en su posición.
Entonces, ¿qué pasa cada que Westbrook entra al partido? Los números de Durant van a la baja.
El PER de Durant baja a 25.4, que lo pondría octavo en la liga. Su porcentaje auténtico de tiros disminuye a un ridículo-pero-aún-así-bueno 61.6 por ciento. Sus totales de rebotes bajan a siete por cada 36 minutos, y su promedio de uso baja a 28.3, ya que él comparte el balón con Westbrook, quien de hecho es el líder de este departamento en la NBA con 31.9 por ciento.
Pero lo más importante es que el Thunder, como equipo, ha podido lidiar con la tormenta sin Westbrook. Las estadísticas de Durant se han incrementado bastante, y lo más importante, la ofensiva del Thunder no se asemeja en nada a la abrumada escuadra que los Memphis Grizzlies vapulearon en los playoffs la temporada pasada.
En las semifinales de la Conferencia Oeste, el Thunder logró apenas 95.4 puntos por cada 100 posesiones, en su derrota 4 triunfos a 1, y generalmente lució abrumado ante los Grizzlies. Seguro, Durant y compañía se salieron con la suya ante los Houston Rockets en la primera ronda, pero contra una defensiva de élite con el beneficio de experiencia en playoffs, el Thunder -sin Westbrook- fue arrollado.
Esta temporada es una historia distinta. El Thunder está anotando 108.1 puntos por cada 100 posesiones con Durant en la cancha y Westbrook fuera, que de hecho es ligeramente mejor que su eficiencia cuando ambos juegan juntos (107.0).
¿Por qué no va a la baja?
Primero, porque Westbrook no estuvo certero inmediatamente luego de volver esta temporada, así que incluso con Westbrook, el Thunder no operaba precisamente a toda velocidad. Segundo, porque el Thunder tuvo todo el receso veraniego para ajustarse a la hipótesis de un mundo sin Westbrook, a diferencia de lo que pasó en postemporada. La preparación es ciertamente importante.
Y finalmente lo más importante-, el desarrollo del base de tercer año Reggie Jackson, quien ha sido uno de los jugadores con mayor mejoría esta temporada, ha cambiado el juego. Las defensivas rivales ya no pueden lanzarle cuatro jugadores a Durant y esperar salir vivos para contarlo. La actuación de Jackson el domingo, donde anotó 27 puntos (cifra más alta de su carrera), no fue casualidad; Jackson ha sido brillante en ambos costados de la duela, beneficiándose de Durant y también a la inversa.
Varias veces en el partido del domingo, incluso Avery Bradley lucía desesperado en frente de Jackson, mientras el resto de la defensiva de los Celtics mantenía las miradas sobre Durant. Con tres triples el domingo, Jackson ha incrementado su promedio de triples a un sólido 33 por ciento, y ya acumula más triples de los que acertó en toda la campaña anterior, en 129 minutos menos.
Jackson no es el único integrante del reparto de soporte de Durant que ha obligado a las defensivas a comportarse distinto. El novato Steven Adams, quien fue reclutado en el draft utilizando la selección de Houston en el canje por James Harden, también le ha dado a Scott Brooks aún más razones para no utilizar a Kendrick Perkins, aunque el veterano todavía inicia de forma inexplicable para un equipo de élite. Jeremy Lamb, el sucesor de Kevin Martin, anota 17 puntos por cada 36 minutos, y acierta 40 por ciento de triples.
Juntos, los salarios de Jackson, Lamb y Adams se combinan para ser menos de lo que los Timberwolves le están pagando a Martin esta temporada. Así es como se puede construir un roster con un presupuesto limitado.
Al final, Durant ha tomado el liderato en la carrera por el JMV en gran parte gracias a las mejorías de sus compañeros. Ellos le permiten hacer tu trabajo con calibre de JMV incluso sin Westbrook. Una ola creciente eleva todas las embarcaciones del básquetbol. Aunque el Thunder necesitará a Westbrook para pelear por el título, los talentos siempre a la alza de Durant han mantenido a Oklahoma City a flote. Si las cosas resisten, Durant no finalizará de nuevo segundo en la votación para el JMV detrás de James. Por ahora, Durant supera a James en estadísticas y, con Westbrook fuera, como una mejor historia.
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